jueves, 4 de junio de 2020

Música 6º E.P.

¡Buenos días!

Algunos de vosotros, después de ver el vídeo de la semana pasada en el que varios músicos grababan una canción desde sus casas, habéis preguntado hasta qué punto es posible grabar música en casa, sin ayuda externa y haciendo que todo suene bien.


La respuesta es que hoy en día, gracias a la tecnología, es posible hasta cualquier punto que queráis. Hasta no hace mucho tiempo, grabar un disco, o una sola canción, era algo muy caro, y había que recurrir al uso de un estudio de grabación y la ayuda de muchas personas.


Todo eso sigue siendo recomendable aún hoy para los que quieren grabar música en serio, pero hay una nueva posibilidad que no existía antes: existen aplicaciones que pueden convertir cualquier ordenador, tablet o teléfono móvil en un completo estudio de grabación. Lógicamente seguimos necesitando algunos instrumentos y nuestra habilidad, pero la posibilidad está ahí; antes no se podía y ahora sí se puede.


El ejemplo que os vamos a enseñar hoy puede parecer algo exagerado, pero es totalmente real: es el caso de Kristine, una chica griega que hizo realidad su sueño de grabar un disco por sus propios medios.


En 2010, al mismo tiempo que compaginaba sus estudios por la mañana y su trabajo por la tarde, Kristine comenzó a dedicar los fines de semana a aprender a tocar los instrumentos que varios de sus amigos tenían, y a componer canciones. Los años fueron pasando y poco a poco, con mucho esfuerzo, se compró su propia guitarra y un teclado electrónico, junto con una aplicación para su ordenador, con las funciones de un estudio de grabación. Hasta que finalmente en 2015, cumplió su ilusión publicando su primer disco, completamente compuesto (la música y las letras), cantado, grabado y producido por ella. Y tocando ella sola todos los instrumentos...


Seguramente no habéis escuchado hablar de ella, y eso se debe a que el empezar como una completa desconocida la ha dejado totalmente fuera de los mecanismos de publicidad que hacen tan famosos a muchos de los artistas actuales. Pero eso a ella le da igual: no buscaba fama ni gloria, sino realizar su sueño de grabar y publicar su propia música, y lo ha conseguido. Y al igual que ella, hay muchísimos otros pequeños artistas en todo el mundo, también en nuestra ciudad, que gracias a las nuevas posibilidades están grabando y dando a conocer sus creaciones.


Kristine en la actualidad ha acabado sus estudios y compagina su trabajo con la grabación de su segundo disco. Mientras tanto, el primero sigue dándose a conocer cada vez a más gente, hasta tal punto que músicos mucho más conocidos que ella están haciendo remixes de sus canciones:


Por supuesto, el esfuerzo y la inspiración siguen siendo necesarios, pues las máquinas no crean las canciones por sí solas. Pero la cuestión es saber que lo que sí nos dan, es la posibilidad de crear cosas con las que hasta no hace mucho tiempo, sólo podíamos soñar. Y en nuestra propia casa.


¡¡Ánimo!!